1. Aceptarás tu cuerpo.
Cuanto mejor te sientas con tu cuerpo, más disfrutarán del momento los dos.
Todas tenemos nuestros pequeños o grandes complejos, pero no por ello vamos a recordarlos permanentemente. Generalmente los hombres en el momento crucial, tienen otra cosa en mente como para ponerse a mirar la celulitis de su pareja. ¡Así que relájate!
2. Aprenderás a excitarle
De lo que se trata es de aumentar el deseo: un escote de vértigo, una mirada pícara, un pequeño juego, un stroptease. Enciende la mecha pero no hagas que explote enseguida, y sobre todo no dejes que se apague.
3. Dejarás que mire
A los hombres les gusta mirar y su deseo pasa por la mirada. Así que ¿Por qué privarle de ese placer? No apagues la luz (sólo se aceptan algunas velas) y déjate ver, concédele el placer de mirarte. Regálale un momento de placer haciendo que también se vea. Pónganse delante de un espejo. Si te incomoda verte en el espejo ponte de espalda. ¡De este modo tu chico podrá observarse en acción!
4. Conocerás sus zonas erógenas
Al igual que la mujer, el hombre no se limita a su sexo y posee numerosas zonas erógenas. Los labios, el cuello y para algunos las orejas pueden transformarse en auténticos detonadores de placer. Tampoco hay que olvidar el interior de los muslos donde la piel es muy fina, los pezones y sus nalgas y por supuesto sus partes íntimas .
Pon en práctica ciertos verbos para excitarle: besar, acariciar, mordisquear, chupar, lamer...
5. Explorarás su punto H.
Está situado cerca de la uretra y de la próstata, al interior del recto, sobre la parte que separa el cuerpo del pene y el ano. No siempre resulta fácil de alcanzar, pero con un poco de entrenamiento y lubricante sexual, nada es imposible. Para conseguirlo, introduce un dedo en el ano de tu pareja y remonta delicadamente la pared rectal. Si sientes una pequeña parte prominente de la talla de una avellana habrás dado con él. Hay que manipular con precaución esta zona, que promete el orgasmo al masajearla delicadamente pero con firmeza hacia abajo.
6. Expresarás tus deseos.
Es cuestión de expresar los deseos y el placer, una estimulación que anime a tu pareja y que le llevará también hacia el camino de tu éxtasis. Son muchos los que admiten que les excita cuando su pareja utiliza palabras muy directas o con los gemidos de satisfacción de una mujer. No pierdes nada, al contrario, le enseñarás lo que realmente te excita.
7. Harás que se sienta en confianza.
Al contrario de la imagen que pueden dar algunas veces, todos los hombres tienen dudas sobre su comportamiento en la cama y pueden quedarse bloqueados ante una experta sexual. Necesitan sentirse en confianza y de un acercamiento con suavidad. Demuéstrale que él es el único objeto de tu deseo y es el único ser en la Tierra que te excita hasta ese punto. Dile cómo te gustan sus caricias y ciertas partes de su cuerpo, pero no seas demasiado directa para no asustarle.
8. Tomarás la iniciativa.
Los hombres se quejan a menudo que suelen tener que dar el primer paso cuando se trata de relaciones sexuales. Les gustaría que las mujeres tomasen más a menudo la iniciativa. Así que lánzate y dale a entender que te apetece hacer el amor. A veces una mirada y una sonrisa cómplice es suficiente para pasar el mensaje. Pero a veces hay que ser un poco más explícita y algo importante: saber elegir el momento antes de tomar la iniciativa.
Fuente: enfemenino.com
1. Aceptarás tu cuerpo.
