El ramo de novia, o ramo de bodas, es otro de esos detallitos que no debemos dejar para después, ya que será uno de los grandes invitados a nuestra fiesta, y no olvidemos claro, que se irá con alguna otra afortunada a casa, que según las tradiciones: será la próxima en casarse.
Lo cierto es que hay bastante a tener en cuenta a la hora de elegir el ramo, lo primero es, claro, que combine con el vestido y el look de la novia, además de la decoración que hemos elegido para el salón donde se realizara la fiesta de bodas.
Lo siguiente es elegir si queremos flores naturales o sintéticas, que suelen usarse mucho dado que son más fuertes y resisten mejor todo el proceso, pero claro, las naturales tienen ese encanto particular de los real, que hará que muchas novias terminen siempre eligiéndolas, aunque duren menos.
Para aquellas novias que siempre están en la búsqueda de esos detallitos que sin ser demasiado costosos den un giro a la fiesta y la boda, y les permita ser originales y salirse de lo convencional, una idea fantástica es la de agregar ornamentos al ramo, como por ejemplo: mariposas.
La frescura que puede darle este pequeño y delicado adorno a cualquier ramo de novia, sea natural o artificial es impagable, y si bien se están poniendo de moda no muchas se atreven, así que tu podrías romper con el molde y elegir una brillante mariposa para colocar en tu ramo, haciendo juego o contrastando con el mismo.
El ramo de novia, o ramo de bodas, es otro de esos detallitos que no debemos dejar para después, ya que será uno de los grandes invitados a nuestra fiesta, y no olvidemos claro, que se irá con alguna otra afortunada a casa, que según las tradiciones: será la próxima en casarse.
